La pandemia empujó la popularización del formato cinematográfico conocido como screenlife, aunque, básicamente, es la evolución del found footage o metraje encontrado. En pantalla vemos otras pantallas, reflejando buena parte de nuestras vidas en el “nuevo milenio” y su desarrollo por medio de dispositivos electrónicos. Antes de 2020 pocos usaban Zoom, hoy día es la norma para reuniones a distancia, sean laborales, escolares o lúdicas.
Si bien este tipo de películas han ganado terreno en el mainstream –hace siete años, por ejemplo, se estrenó la exitosa Eliminar amigo (Unfriended, 2014)–, actualmente nos encontramos ante una inevitable explosión del formato. No es coincidencia que uno de los proyectos de terror más populares del primer año en “cuarentena” haya sido Host (2020), de Rob Savage, que llevó el terror sobrenatural más clásico –una sesión espiritista que se sale de control– a una reunión de Zoom. Es un trabajo disfrutable de menos de 1 hora que va directo al grano, sus jump scares son efectivos. Sin inventar el hilo negro –si acaso inauguró el uso en cine de Zoom–, se estrenó vía streaming en el momento justo.
Mientras que Savage fue “fichado” por Blumhouse, los pioneros del screenlife parecen estar reclamando su formato. Hablo de Bazelevs, la compañía fundada por el reconocido Timur Bekmambetov, responsable de la mencionada Eliminar amigoy los thrillers Buscando…(Searching, 2018) y Profile (2018). Para sorpresa de nadie, Bazelevs se sumó a los exponentes de este formato durante la pandemia: el año pasado Bekmambetov declaró a Deadline que tiene ¡unos 50 proyectos de diversos géneros en desarrollo! De hecho, firmó un acuerdo por cinco películas con Universal Pictures. Con la llegada de más y más filmes narrados a través de pantallas, es natural que la audiencia comience a buscar cualidades diferentes en cada propuesta.
La rusa #Blue_Wale (2021), dirigida por Anna Zaytseva y producida por Bazelevs, está inspirada en un caso real: a partir de un reporte periodístico firmado por Galina Mursalieva en 2016, los suicidios de 130 jóvenes fueron ligados al reto de la “Ballena azul”, supuestamente difundido en grupos de Internet por “curadores” que ponían 50 retos a realizarse en 50 días, culminando en una invitación a quitarse la vida. Es un caso complejo que llegó a otros países provocando histeria, imitadores y arrestos. Todos los reportes al respecto enfatizan la imposibilidad de confirmar que cada uno de los suicidios haya sido realmente parte de este juego perturbador.
La película comienza con dos hermanas adolescentes peleando, rápidamente se establece que Yulya (Diana Shulmina) es la consentida de su mamá (Ekaterina Stulova), la chica dulce que sabe manipular para que Dana (Anna Potebnya) sea injustamente la única regañada. Sin embargo, la verdadera trama arranca unos meses después tras el shockeante suicidio de Yulya, videos del suceso circulan en la red. Motivada por la creencia de que su madre la culpa por la tragedia, Dana decide indagar en la computadora de su hermana fallecida. Un perfil alterno en una red social similar a Facebook revela un lado de Yulya que nadie de su círculo cercano conocía: fotos provocadoras en paños menores, también posteos y archivos del juego de la “Ballena azul”. Cuando un detective desestima la evidencia compartida por Dana, porque los responsables del reto fueron arrestados años atrás, ella se convierte en investigadora, dispuesta a conocer la verdad sobre la tragedia de su hermana.
#Blue_Wale está en la vena de thrillers que siguen al detectivesco personaje central mientras se adentra en aguas peligrosas, aquí, por ejemplo, la pantalla de computadora pasa a ser la de un smartphone cuando Dana –con el apoyo a distancia de su mejor amiga (Olga Pipchenko)– se mete a un departamento para indagar en la computadora de otra víctima. Es cuestión de tiempo para que la protagonista entre al juego suicida de la “Ballena azul”, con la intención de desenmascarar a los responsables. La película tiene reminiscencias del J-horror (terror japonés) hecho a finales de los años noventa y principio de los dosmiles: la curadora/antagonista principal recuerda a Sadako de El aro (Ringu, 1998). Aunque aquí no existe terror sobrenatural, el foco está en algunas de las 21 tareas que Dana debe completar, iniciando con dibujar algo que represente su dolor, obviamente las tareas subirán de tono: debe cortarse las muñecas, “torear” a los carros en una avenida, pasearse semidesnuda por su escuela, traicionar a una persona de confianza, etc.
#Blue_Wale también aborda los primeros pasos de un potencial romance entre Dana y Lesha (Timofey Eletskiy), un chico que participa en el reto, aunque él busca ponerle fin a sus días. El comentario contra el suicidio se subraya cuando Dana trata de hacerle ver su valía y en como la evidente falta de comunicación entre las hermanas y su madre desemboca en la importancia de entablar relaciones de confianza entre familiares. #Blue_Wale no pretende ser una película profunda sobre un tema por demás complicado, su propuesta es netamente de género, sobre todo en la confrontación de nuestra protagonista con la misteriosa enmascarada que controla el reto: “Ada Morte” es una antagonista imposible de engañar, maestra del hackeo y casi omnipresente, además se niega a aceptar que un joven recapacite antes del suicidio. Incluso puntos interesantes en la problemática relación entre Dana y su madre –piensa que su hija anda en drogas o, por la preocupación, la lleva a un hospital psiquiátrico, un punto argumental clásico en el terror: véase Candyman (1992) o El hombre invisible (The Invisible Man, 2020)– parecen meros obstáculos para Dana en la confrontación central.
No es coincidencia que “Ada Morte” en ocasiones luzca como villana de slasher, con todo y cuchillo en primer plano. Al final, en sus momentos efectivos, #Blue_Wale es sobre una asesina o asesino que enfrenta en el clímax a la “final girl” (quien se revela como virgen como se acostumbra en el género), sólo que todo es visto por medio de un live stream que incluye comentarios de los espectadores. Esto le da un peso importante a la revelación de la identidad de “Ada Morte”, y es donde la película es previsible, con un desenlace poco contundente. #Blue_Wale difícilmente se colocará entre las esenciales absolutas del creciente formato screenlife, que en palabras de Bekmambetov es “un nuevo lenguaje”. Aunque, si el público responde, este podría ser el primer capítulo de una franquicia.
PD: Nunca entendí por qué un plot point involucra engañar a los responsables del reto suicida para que proporcionen sus datos en un sitio falso con una promoción para un concierto de Motörhead. La historia se desarrolla en 2019 y “Lemmy” Kilmister falleció en 2015, poniendo punto final a la trayectoria de la legendaria banda británica.
Son tiempos complicados. La pandemia de la COVID-19 ha afectado profundamente a todo tipo de industrias. La del cine se ha quedado prácticamente sin estrenos de gran magnitud y el modelo de exhibición en salas, naturalmente, ha entrado en la que es probablemente su peor crisis.
Los festivales cinematográficos, eventos que usualmente van de la mano con el turismo en su respectiva ciudad sede, han tenido que reinventarse. Algunos, como Cannes, no se llevaron a cabo. Otros, como el Black Canvas FCC o el Fantastic Fest, apostaron por una modalidad híbrida: funciones en salas y otras en streaming.
Nightstream, por su parte, es una propuesta única, se trata de un festival virtual que ha sido organizado en conjunto por cinco festivales de cine de género: Boston Underground Film Festival, Brooklyn Horror Film Festival, North Bend Film Festival , Overlook Film Festival y Popcorn Frights Film Festival. El trabajo en equipo ha resultado en uno de los programas más atractivos de este inusual año.
Cinema Inferno es uno de los medios oficialmente acreditados para cubrir Nightstream, del 8 al 11 de octubre. Si bien no todo el programa estará disponible para los medios extranjeros, a continuación les dejamos los filmes y eventos más atractivos de este encomiable esfuerzo colectivo.
Películas
Deadline
Por más que los festivales sean atractivos por sus estrenos, siempre debemos prestarle atención a sus rescates de cine de antaño.
Deadline (1980) es un exponente de la Canuxploitation (cine de explotación canadiense), sobre un escritor de terror en decadencia. Nightstream estrenará mundialmente su versión restaurada, presentada por Vinegar Syndrome y el American Genre Film Archive (AGFA).
Frank & Zed
¡Una película de terror protagonizada por marionetas! No se necesita saber mucho más de Frank & Zed (2020) para que sea el estreno mundial que más nos emociona del Nightstream. Dirigida por Jesse Blanchard, esta labor titánica sigue a dos monstruos que son atacados en su castillo por una muchedumbre.
Leap of Faith: William Friedkin on The Exorcist
Es el nuevo trabajo de Alexandre O. Philippe, quien ya se ha convertido en algo así como el documentalista oficial del cine de género. En años recientes ha explorado Psicosis (Psycho, 1960), en 78/52 (2017), y Alien, el octavo pasajero (Alien, 1979), en Memory: The Origins of Alien (2019). Toca el turno de abordar la controversial e influyente El exorcista (The Exorcist, 1973).
Mandibules
Quentin Dupieux es uno de nuestros directores contemporáneos favoritos, un verdadero genio de la comedia y de lo absurdo (aquí pueden leer las reseñas de Keep an Eye Out y Deerskin). Su nuevo largometraje, Mandibules (2020), tuvo una gran recepción en el Festival de Venecia, se ha dicho que es su filme más accesible. La premisa no podría ser más extraña y atractiva: dos amigos se topan con una mosca gigante y la deciden entrenar para ganar dinero. Suena a que estamos ante una de las grandes comedias, con toque fantástico, del año.
The Doorman
Acabamos de ver la gran película de acción Crazy Samurai Musashi(2020) en la edición virtual del Fantasia International Film Festival. Su protagonista, Tak Sakaguchi, se dio a conocer gracias a Versus (2000), dirigida por Ryûhei Kitamura, quien precisamente es el hombre detrás de The Doorman (2020). La actriz Ruby Rose (quien aparece en John Wick 2: Un nuevo día para matar) protagoniza este thriller de acción en el que una portera de un rascacielos neoyorquino tiene que lidiar con un grupo de ladrones de arte (quienes son liderados por el personaje de un viejo conocido: Jean Reno).
The Queen of Black Magic
Joko Anwar, uno de los cineastas más consolidados de Indonesia (recientemente filmó la película de superhéroes Gundala), escribió el guión de The Queen of Black Magic (Ratu Ilmu Hitam, 2019). Dirigida por Kimo Stamboel (responsable del filme de acción Headshot, con Iko Uwais de La redada), The Queen of Black Magic promete terror y gore, a partir de una historia sobre una familia que visita el orfanato donde creció el padre.
The Obituary of Tunde Johnson
Ya lo mencionábamos en el texto de Vampiros vs. el Bronx (Vampires vs. the Bronx, 2020): el cine de género es adecuado para abordar temas de relevancia social. The Obituary of Tunde Johnson (2019) es otro filme con base en un time loop (bucle temporal), su peculiaridad es que es un comentario sobre la brutalidad policial en contra de los afroamericanos (pocos temas más pertinentes hoy en día). El protagonista es un joven negro que vivirá una y otra vez el día en el que es detenido y asesinado por la policía.
Eventos
Virtual Fireside With Nia DaCosta
La joven cineasta Nia DaCosta charlará sobre su carrera y, por supuesto, la esperada nueva entrega de Candyman (2021), cuyo estreno fue pospuesto por la pandemia hasta 2021.
The Morbido Crypt’s Guide to Mexican Fantasy and Horror Cinema
Nuestro amigo Abraham Castillo Flores, programador de Mórbido Fest, presentará un panel que le dará el valor que merece al cine de terror y fantástico mexicano, usualmente menospreciado por nuestras propias instituciones.
25th Anniversary Celebration of Tales from the Hood with Rusty Cundieff
En el panorama actual de creciente tensión racial en Estados Unidos, la antología de terror Tales from the Hood (1995) parece igual o más relevante que en la época post-Rodney King. Nightstream ofrecerá una charla, por motivo de los 25 años del filme, con su director Rusty Cundieff.
“Son películas de artistas negros para el público negro, si los blancos las quieren disfrutar, bien, pero no se trata de ellos, se trata de nosotros”, afirma Tananarive Due, productora y una de las protagonistas del documental Horror Noire: A History of Black Horror (2019), al hablar de cintas como ¡Huye! (Get Out, 2017), de Jordan Peele. Precisamente en un momento histórico en el que ¡Huye! y, fuera del género de terror, Pantera Negra (Black Panther, 2018), de Ryan Coogler, se han convertido en genuinos fenómenos taquilleros que han marcado un antes y un después en la industria de Hollywood.
El vital documental Horror Noire: A History of Black Horror, de Xavier Burgin, basado en el libro homónimo escrito por Robin R. Means Coleman, invita a conocer la perspectiva de los afroamericanos en torno al cine de terror. En esta ocasión no se trata de nadie más, sólo de ellos, una minoría en un país como Estados Unidos donde el racismo es inherente a su historia y, naturalmente, se ha visto reflejado en la pantalla grande desde las primeras décadas del séptimo arte (El nacimiento de una nación, de D.W. Griffith, el ejemplo perfecto).
Con una estructura cronológica, que va de los títulos más antiguos del terror con personajes de raza negra (tales como Son of Ingagi de 1940) hasta el primer metraje de Nosotros (Us, 2019), el próximo filme de Jordan Peele que tendrá su estreno en marzo de 2019, Horror Noire: A History of Black Horror junta a un excelente grupo de entrevistados –de directores (el propio Peele, Ernest Dickerson, William Crain, Rusty Cundieff), actrices y actores (Rachel True, Tony Todd, Ken Foree, Keith David) a especialistas (Ashlee Blackwell, quien se enfoca en el rol de las mujeres en el cine de horror, y las ya mencionadas Due y Coleman)– para brindar una disección fílmica única, ciertamente enfocada en la representación de los negros en el cine de terror.
Así, su total invisibilidad, su relegación a personajes menores o monstruosos (existe el argumento de que King Kong o la Criatura de la Laguna Negra representaban a esta raza), su problemática inclusión en la época de los “pimps” y las “hoes” de la blaxploitation, y por supuesto los interminables clichés a los que han sido sometidos –aunque, para algunos, esto era mejor que nada en los años de Ronald Reagan–, del personaje token, las mujeres que son expertas en vudú, al negro “mágico”, al que se sacrifica por el héroe blanco o el que siempre es el primero en morir, nos llevan a la valorización de momentos que cambiaron el rumbo de la historia, por ejemplo: La noche de los muertos vivientes (Night of the Living Dead, 1968) y su fuerte e inteligente protagonista negro (Duane Jones) liderando la resistencia contra los ghouls en plena década de los movimientos por los derechos civiles; el primer Drácula negro (William Marshall) en Blacula (1972); Candyman (Tony Todd) como prueba de que los negros también pueden ser antagonistas a la Freddy Krueger; la conciencia social y el horror de lo mundano de Tales from the Hood (1995), una producción de Spike Lee para la época post-Rodney King; el ascenso del personaje femenino empoderado a partir de la final girl (Jada Pinkett Smith) de Tales from the Crypt: Demon Knight (1995), y ¡Huye!como una cinta que se concibió con toda la intención de romper con esos estereotipos y que llegó tras el fin de la utópica “América post-racial”.
Además de poner reflectores en filmes menos conocidos, como Ganja & Hess (1973), Eve’s Bayou (1997) o Bones (2001), este documental básicamente nos hace entender la importancia de la justa representación en un medio masivo, indudablemente poderoso como las imágenes en movimiento (no es coincidencia que los entrevistados estén adentro de una sala de cine), que, como ejemplo de su poderío (negativo en este caso), incluso provocó el renacer del Ku Klux Klan tras la visión racista de El nacimiento de una nación (1915) (“un filme de horror para la audiencia negra”, dicen en un momento del documental). Entonces, es momento de escuchar, de comprender que el efecto de películas recientes como Attack the Block (2011), Melanie: Apocalipsis Zombie (The Girl with All the Gifts, 2016) o ¡Huye!será muy diferente para la minoría afroamericana que por décadas ha visto la relegación de su raza y que continúan sufriendo la intolerancia en la era de Donald Trump, pero que al menos en el cine de terror pueden, ahora sí, verse reflejados y gozar de una presencia prominente y justa que era totalmente inimaginable en el pasado. Horror Noire: A History of Black Horror es un filme que se trata de ellos, de ese largo y doloroso camino de ver a actores blancos con sus caras pintadas de negro hasta tener a una niña negra (Sennia Nanua) al centro de una historia de zombies o sufrir con la huida del personaje de Daniel Kaluuya de sus captores blancos; para el resto de nosotros es momento de, simplemente, maravillarnos por un entretenido, profundo y contextualizado análisis fílmico pero, sobre todo, de sentir empatía.
Bonus: Entrevista con Ashlee Blackwell, co-escritora, co-productora y protagonista de Horror Noire: A History of Black Horror
Cinema Inferno: Parece que un documental como Horror Noire: A History of Black Horror sólo podía hacerse en este momento positivo para los afroamericanos en el género de terror, especialmente gracias al gran éxito de ¡Huye!…
Ashlee Blackwell: Este es el mejor momento para que salga a la luz, ya que sólo unos pocos estábamos realmente investigando este tema y ahora todos tienen un interés general o están familiarizados por lo que pudimos hacer con el documental o, antes de eso, con nuestro sitio web y con lo que sea que estábamos haciendo.
Phil Nobile Jr., el editor en jefe de Fangoria, estuvo en el lugar correcto en el momento correcto, trabajó en una compañía de producción en la misma ciudad en la que vivimos ambos [Filadelfia], y tuvo la libertad de decir: “Quiero hacer esto porque ¡Huye! es un momento muy importante”. Era perfecto para él, ya que sólo quería juntar a las personas adecuadas, entre ellas yo, y me habló por primera vez porque, de nuevo, los dos vivíamos muy cerca, teníamos una gran amistad antes de trabajar juntos. Un día simplemente dijo: “hey, ¿te gustaría subir a bordo?”, y yo dije: “sí”. No tenía idea de lo que eso implicaba porque nunca hice nada relacionado con la producción en ningún momento.
Mi presencia es realmente para llenar los vacíos, no era como que quería saltar para estar frente a la cámara, realmente sólo quería escuchar la perspectiva de otras personas. Si sentía que había espacios en el documental que no necesitaban mi voz porque ya estaba cubierta, nunca me incliné a ser parte de todo. Primero soy una estudiante y luego una maestra.
Al ver el documental, sientes que la representación en el cine es algo extremadamente importante, pero tal vez algunas personas realmente no lo piensen. En la película mencionas que algunas de las primeras películas de terror son geniales, pero al mismo tiempo están llenas de tropos y clichés sobre los negros. Creo que el poder del cine, el poder de la representación, es la clave de Horror Noire: A History of Black Horror, ¿qué tan importante es para ti comunicar esto a las audiencias?
Sí, quiero decir, cuando las personas que pasan toda su vida viendo a personas que se parecen a sí mismas donde quiera que vayan, incluso en la televisión, en las películas, les resulta muy difícil entender cómo es para una persona, de cualquier otro color, tener la experiencia opuesta. Es por eso que hay una celebración comunitaria, específicamente hablando de las personas negras en este momento, al ver estas imágenes en la pantalla grande, en una plataforma mainstream.
Casi parece que la vida se ratifica, porque cuando no te ves a ti mismo, no sientes que importas, no sientes que eres visible, y esa puede ser una experiencia muy frustrante, que lleva inevitablemente a una emoción negativa. Salir de eso, y ser uno mismo, es muy importante.
Se dice específicamente en el documental que si pasas toda una vida con personajes que no se parecen a ti en la pantalla, especialmente en el horror, y ahora por fin estás viendo más héroes que antes, es estimulante, no hay otra forma de describirlo, se trata realmente de la emoción. Casi te hace sentir vivo, es una extensión de lo que estás deseando toda tu vida, ver esa variedad de representaciones tuyas en la pantalla; no es todo blanco o negro, a veces nos enojamos, somos villanos, somos héroes.
Es por eso que la representación es tan importante, especialmente en el horror porque el horror se trata de profundizar en los temores humanos, eso es lo que realmente atrae a la gente. Luchar por sobrevivir es un sentimiento muy universal y eso es lo que ¡Huye! hizo para mucha gente.
El documental se remonta a El nacimiento de una nación y tiene una estructura cronológica. La historia del horror negro es ciertamente muy conflictiva, la película salta de la década de 1940 a 1968 [La noche de los muertos vivientes] porque básicamente no hay mucho más entre ambas. Entonces, en un sentido general, ¿cuáles son para ti los momentos clave en la historia del horror negro?
Fue genial ver a los personajes negros en las películas de la década de 1980, pero en el horror, en las películas slasher, muy rara vez veías a un personaje sobrevivir e incluso si sobrevivía, hacía muy poco fuera de los tropos del terror negro, como Rodger (Alvin Alexis) en Night of the Demons (1988).
Fue genial ver a una variedad diferente de mujeres negras en la pantalla, en los slashers de los ochenta esa chica era Sheila (Toy Newkirk) en A Nightmare on Elm Street 4: The Dream Master (1988), pero luego termina siendo uno de los primeros personajes en morir, por lo que no tuvo mucho tiempo en pantalla ni un arco narrativo; al mismo tiempo, sí tuvo un gran impacto en nuestra generación de fans de raza negra.
El documental eventualmente hará que la gente conozca algunas películas de las que probablemente nunca hayan escuchado antes. En mi caso, acabo de ver Bones, ya que era una película que no estaba en mi radar aunque me gusta Snoop Dogg y conozco al director [Ernest Dickerson]. Mencionas, por ejemplo, cómo se pasan por alto las secuelas de Candyman (1992), así que, en ese sentido, ¿cuáles son las películas por las que estás más ansiosa para que la audiencia descubra?
Muchas de ellas. Me gusta el hecho de que hicimos un poco en el documental para ampliar el concepto de qué es el horror.
Casi siempre es discutible el caso de Eve’s Bayou, yo defiendo la forma en que se inclina al horror, más aún en Twitter. El horror es mucho más amplio de lo que imaginamos. En su núcleo, el horror consiste en evocar el miedo, en mostrar el miedo, especialmente en sus personajes. Así que Eve’s Bayou es una película que a menudo juega con sus elementos sobrenaturales, sobre el vudú, pero también estás viendo el primer despertar en esta chica realmente joven (Jurnee Smollett), todavía no está en la pubertad pero está llegando ahí. Ella está siendo expuesta a todas estas imágenes, naturales y sobrenaturales, que realmente la asustan, y de nuevo eso es horror. Es un drama, pero también es horror.
El horror se muestra en muchos otros géneros diferentes y quiero que la gente entienda que así es el género, siempre va a incorporar otros aspectos porque siempre va a estar en algún tipo de historia humana.
Eres muy prominente cuando se habla sobre el papel de las mujeres negras en el horror. Por ejemplo, mencionas la importancia de tener en la década de 1990 la primera final girl negra [el personaje de Jada Pinkett Smith en Tales from the Crypt: Demon Knight] y cómo hubo más “mujeres intrépidas” en la pantalla después de eso. ¿Puedes comentar sobre cómo te sientes acerca de la actual representación de las mujeres negras en el horror?
Creo que ahora va bien. Siento que quiero llevar a más gente a las cineastas independientes de terror, específicamente a las mujeres negras, porque ahí es donde verán imágenes interesantes y nuevas, estoy hablando de imágenes súper frescas de mujeres negras en las películas de terror.
El tráiler de Octavia Spencer para Ma (2019), eso es algo que no esperaba, escuché que iba a estar en una película llamada Ma, oí que iba a ser de terror, pensé que probablemente iba a ser un personaje secundario, y ahora que vi el tráiler, ella es la protagonista y parece que será la antagonista, ¡así que me voló la cabeza! No estaba esperando esto.
Hablamos de héroes negros, pero ahora también vemos lo que quiero ver: varias perspectivas, personajes y visiones en el horror con mujeres negras. Esa fue una pequeña sorpresa, al ver a Octavia Spencer en el centro de una película realmente interesante que espero tenga más partes interesantes, espero que el tráiler no esté revelando demasiado.
También está Suicide by Sunlight (2019) de Nikyatu Jusu, que acaba de estrenarse en Sundance, una película de vampiros, específicamente con vampiros negros y cómo navegan por el mundo. Estoy realmente emocionada por donde se encuentran ahora las mujeres negras.
Al final, creo que es un documental muy positivo, con la aparición de películas como Attack the Block que eran imposibles de concebir en el pasado. En general, ¿qué piensas sobre la evolución del horror negro a lo largo de los años?
Estoy feliz por eso. No puedo predecir el futuro. Estoy más animada por la posibilidad de que más personas con empleos de tiempo completo, vayan a casa, graben una película el fin de semana y la suban a Vimeo. Esas son las personas que quiero ver en el futuro.
Es genial ver nombres conocidos, pero no me impulsa la celebridad, me motiva el trabajo que puedo ver de personas que realmente tienen una visión y talento. Quiero que Hollywood le brinde una oportunidad a las personas que son realmente apasionadas por el género, esas son las personas negras que quiero ver en el futuro, porque hay muchas cosas geniales que están saliendo.
Finalmente, de todas las películas que se mencionan en el documental, ¿cuáles son las cinco que crees que son esenciales para entender el papel de los negros en el horror?
Son of Ingagi, Ganja & Hess, Tales from the Hood, Melanie: Apocalipsis Zombiey Nosotros.